Aspectos
generales.

La parte posterior es la más llana la atención
debido a su forma ya que asemeja la punta de una flecha, coincide con el eje
principal del monumento, en lugar de estar orientado norte-sur, como lo están
todos los edificios de Monte Alban, se desvía hacia el oriente aproximadamente
unos 45°, hacía donde es posible observar con mayor precisión cinco importantes
estrellas.
Sabios astrónomos zapotecas estudiaban el cielo
observando planetas y acontecimientos cósmicos, fenómenos que eran tomados como
buenos o malos augurios.

Finalmente el doctor Alfonso Caso concluyó que
se trataba de un observatorio, señalando que hay puntos desde los cuales se
pueden dirigir la vista hacia los lugares donde sale y se pone el Sol durante
los solsticios.
El doctor Caso interpretó que las inscripciones
y grabados que se localizan en los paramentos traseros, ostentan los nombres de
algunos lugares conquistados por el pueblos Zapoteca, por lo que se les asignó
con el nombre de lápidas de conquista.
Se ha mencionado que no hay una aceptación en
total por parte de los estudiosos que han centrado su interés en el edificio J;
se han publicado interesantes estudios de astrónomos, físicos y matemáticos que
sostienen el carácter astronómico del edificio.

Las posiciones bastantes exactas determinadas
por GPS, muestran una línea entre los edificios J y O de Caballito Blanco
coinciden en las posiciones del sol los días de paso por el cenit y el nadir.
Cabe mencionar el carácter zapoteca de las líneas visuales astronómicas que
cruzan al barrio Zapoteca o Tlailotlacan, pues si bien no tiene ninguna
importancia innegable en Monte Alban, considerando la línea. La orientación de
la Calzada de los Muertos procede directamente del uso de estas líneas visuales
Zapotecas, proveniente de la astronomía del valle de Oaxaca.
Además han observado que este edificio muestra
una relación directa con el movimiento aparente del Sol: el muro sur de la
“flecha” está precisamente levantado a lo largo en la dirección de la puesta y
salida del Sol.
Relación
con el edificio P

Otra deidad importante era Pitao Cosobi, dios
del maíz. Los días del paso cenital del Sol en Monte Alban se fechan el 8 de
mayo y el 5 de agosto. Durante observaciones nocturnas realizadas por
astrónomos, las pleyares fueron visibles a través del tubo.
Lápidas
de la conquista
El montículo J procede a la época II de Monte Alban, es el
edificio más extraordinario de Monte Alban, y quizá en toda Mesoamérica debido
a su extraña planta, en forma de punta de flecha y por su orientación NE.-SO.
Que contrasta con la de los otros edificios de Monte Alban, orientados siempre
hacia los puntos cardinales, o con la de Teotihuacán, Tula, Chichen Itza, con
sus edificios orientados hacia el lugar de la puesta del Sol.
Desgraciadamente el montículo J
es uno de los más destruidos de Monte Alban, y es muy probable que haya sido
volado en la época colonial, colocando en la cámara central un barril de
pólvora. Por esta razón se encontraron la gran mayoría de piedras de este
montículo entre los escombros que cubrían la base, y solo las que formaban la
fachada de cuerpo interior fueron encontradas en su sitio y permitieron una
reconstrucción del edificio.
El montículo J sufrió varias superposiciones, desde que se
construyo el templo primitivo, y que algunas de ellas ya fueron en la época II.
Después de la época II, el montículo J se siguió utilizando, ya que las piedras
de la fachada aparecieron cubiertas de estuco, y el piso estaba más alto que
las piedras labradas.
Estructura
El edificio ‘’J’’ presenta varias etapas constructivas y
modificaciones desde que se construyo el templo primitivo y que algunos de
ellas fueron de la época II, pues en algunas piedras labradas del mismo estilo
aparecen en la fachada del recinto siendo estas utilizadas anteriormente en
otras estructuras.
La primera estructura alberga el pasadizo que conforma el
observatorio, su plataforma basal tiene parámetros verticales y termina en
ángulo por la parte trasera. En lo más alto del cuerpo principal de la
estructura repite la planta de la plataforma basal.

Al frente se encontraba el acceso a una cámara que por detrás
posiblemente vuelve terminar en ángulo. No hubo ningún indicio de escalinata
pero se debió haber para poder subir al recinto t al deambulatorio.
Segunda
estructura
La segunda estructura consolido lo que sobro de la primera y
después de que se derrumbara el parámetro oriental de esta. Los contrafuertes
añadidos al oriente y poniente junto con la nueva escalinata dieron al edificio
su característica de punta de flecha.
En esta reconstrucción se emplearon esculturas de la época
constructiva anterior y losas del montículo de los danzantes.
Los contrafuertes cuentan con 3 muros verticales sobrepuestos
que, junto con la escultura elevan el
nivel del piso para el nuevo recinto a la altura del techo y del anterior aun
ni se conservan datos sobre el nuevo recinto.
La escalinata al parecer no tuvo alfardas, y sus escalones
fueron realizados mediante uno o dos bloques gruesamente estucados y sus
huellas miden 40 cm y los peraltes 36 aproximadamente.
Tercera
estructura

Nuevos escalones fueron construidos con muescas y gruesamente
estucados recubren la escalinata inferior y los peraltes miden 55 y 33 cm
respectivamente. Sobre lo alto del edifico se coloco una plataforma con el
recinto del que solo quedan hoy en día los muros de la fachada.
Por la parte de atrás de amplio la antigua estructura basal,
decorándola luego con un talud de escaloncitos estucados. En este nuevo
elemento hizo necesario levantar el piso del deambulatorio mismo que cubrió la
parte baja de las lapidas de conquista pero al mismo tiempo estas debieron ser
recubiertas con una capa de estuco.

Cuarta
estructura.
La cuarta estructura es la versión final del edificio con
nuevas alfardas monumentales con muros verticales que reúsan Danzantes y
lapidas de conquista junto con una escalinata realizada mediante uno o dos
bloques por escalón con huellas de 32 cm de peralte y 27 cm, amplían así la
estructura hacia el frente. Dos cuerpos bajos con muros que ensanchan la
construcción hacia los lados.
Descripción
general de las lápidas del montículo J
En las lápidas se puede encontrar generalmente:
a)
Una cabeza humana
b)
El glifo “cerro” (lugar)
c)
Un conjunto de jeroglíficos (nombre del lugar)
d)
Una inscripción (año, mes l día y otros)
Estos elementos no existen
siempre en todas las lápidas, principalmente se encuentran los tres primeros
elementos aunque varia, a veces falta uno de ellos o bien solo está el glifo
del cerro y el nombre.
Las cabezas humanas:
Están dibujadas a la misma
escala, representadas hacia abajo y todas viendo hacia el mismo lado o
dirección. La mayor parte conservan líneas en el rostro que indican tatuaje o
pintura facial y todas poseen gorros o tocados amarrados debajo de la barba por
una cinta a modo de barboquejo.
Algunas cabezas están sustituidas
por glifos y en un caso la cabeza lleva una máscara, que claramente la
identifica con la del dios de la lluvia “Cocijo”
El glifo del cerro:
El glifo consiste en una figura
como basamento, de dos cuerpos, decorada interiormente con dos gafas
transversales, juntas o separadas por un espacio, que van siempre de derecha a
izquierda y de arriba abajo.
El glifo de lugar. El glifo del
cerro es prácticamente igual en todos los casos, por lo que sólo debe tener un
sentido genérico, como “lugar” o “pueblo”, equivalente al náhuatl altepetl.
Las inscripciones:

Muchos de los glifos de le época
I pasan a la época II y el uso de los dedos en vez de numerales y la forma de
esculpir la figura humana hacen creer que no hubo interrupción entre esas dos
épocas de Monte Alban.
Me gusto mucho su investigación, me esta ayudando mucho en mi exposición de Arquitectura de Monte Albán. Saludos
ResponderEliminar